El cuidador, un caldense de 53 años, asumió ser el dueño de una extenso cultivo localizado junto a una pequeña vivienda rural.
La Guardia Civil ha detenido en Godos a un vecino de Caldas que ha admitido ser el propietario y cuidador de una extensa plantación de marihuana con 120 ejemplares. El hombre, de 53 años y cuya identidad responde a la iniciales J.M.L., carecía de antecedentes y ha quedado a disposición de los juzgados del municipio para cuando sea requerida su presencia.La actuación se produjo este pasado fin de semana, en concreto el sábado, dentro del programa de erradicación del cultivo y venta de sustancias estupefacientes que está llevando a cabo el instituto armado. La plantación a la que accedieron los agentes del puesto de la Guardia Civil de Caldas se encontraba en una finca rural abierta. En ella había, además de una pequeña edificación de planta baja, domicilio del detenido, tres invernaderos caseros consistentes en un plástico sujeto por unos postes de madera y en cuyo interior estaban las plantas.
Desde esta construcción salían cables eléctricos que conectaban con los invernaderos donde había lámparas alógenas, ventiladores y un deshumidificador, además de termómetros, una báscula de precisión y diversos abonos y herramientas para su cultivo. Por todo ello se procede a la incautación de dicha plantación y a la detención de su propietario. Los portavoces oficiales del cuerpo indicaron que este varón admitió ser el dueño de los plantas.
Las 120 plantas de marihuana de las que se incautaron los agentes que arrojaron un peso aproximado de 50 kilogramos, señalan estas mismas fuentes. Ahora, tras haber prestar declaración, el detenido quedó en libertad con la obligación de presentarse en el Juzgado de Instrucción número uno de Caldas.
