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| Burga Fuego de Dios |
Se los esperaba para las nueve de la mañana, pero antes de las 8:15 ya estaban tres operarios de Termas de Cuntis picando en la burga “Fuego de Dios”, ubicada en la Praza de Galicia, para abrir la arqueta y permitir que el agua brotase de nuevo por el caño público. Después de tres meses de aprovechamiento por parte del balneario (del 1 de julio al 30 de septiembre, tal y como establece un convenio de 1835), los cuntienses ya pueden hacer uso de nuevo de las aguas minerales que emanan de la citada fuente, emplazada en terreno público. Si bien, el caudal no es el que debería. Los registros de la Consellería de Industria lo establecen en 0,4761 litros por segundo, pero ayer apenas alcanzaba los 0,095 litros, según las mediciones realizadas la plataforma vecinal por la recuperación del patrimonio termal. La Policía Local también realizó mediciones, si bien los resultados todavía se desconocen ya que se está a la espera de la elaboración del correspondiente informe, explica el alcalde, Antonio Pena. Aún sin contar con los datos concretos, sí reconoció que “parece que (la burga) echa menos (agua) de la que tendría que echar”. De confirmarse definitivamente que el caudal “no es el correcto, nos pondremos en contacto con Industria, que es quien tiene que tutelar el manantial, y con Termas de Cuntis, que tiene la concesión” de su aprovechamiento, avanza Pena.
El regidor estuvo presente en la apertura de la arqueta, junto con la secretaria municipal y el oficial de la Policía Local, tal y como había solicitado la plataforma. Los acompañaron integrantes del colectivo vecinal, el edil de ANC, Serafín Escariz, y la responsable del balneario, Marisol Espiño. Entre la penumbra y sin apenas luz natural se acometieron los trabajos. “Levo aquí 23 anos e nunca madrugaron tanto”, decía sorprendida una vecina. Los operarios picaron el cemento y movieron una losa de piedra, abriendo una rendija de poco más de 20 centrímetros de ancho por la que uno de los trabajadores introdujo una mano para, aparentemente, taponar el caño que conduce el agua hacia el balneario. “Non tivemos acceso ao procedemento mecánico-manual” ni se pudo “comprobar se hai fendas” u otras afecciones en la burga, lamenta Héitor Picallo, integrante de la plataforma vecinal. Ese era uno de los objetivos del colectivo, pero no había ni luz suficiente “nin vontade para inspeccionar a arqueta”, dice recordando que la responsabilidad de investigar los motivos del escaso caudal recae en, en primer término, en la administración municipal y, después, en la Consellería de Industria.
La plataforma solicitará que, a partir de ahora, se realicen “medicións periódicas e aleatorias” del caudal para comprobar su evulución. El alcalde confirmó que “cada dos o tres días” se tomarán datos para determinar si el agua que emana de la burga “va a más, a menos, o se estabiliza”.
Tras el “fiasco” plenario del viernes, representantes de los grupos políticos y de la plataforma mantuvieron el lunes una reunión a la que acudieron acompañados por sendos asesores jurídicos. El colectivo vecinal insistió en que “se abra un expediente de investigación e recuperación do patrimonio termal en base a os usos e costumes, que son xeneradores de dereito”, incide Héitor Picallo. El expediente se va a iniciar, confirma el alcalde, que encargará al asesor jurídico Pedro Palomino un informe que analice “la posible recuperación del patrimonio que la plataforma dice que se perdió”. Picallo ve “boa predisposición” por parte de todos los miembros de la Corporación, a los que pide que “sexan leais á cidadanía, porque é a súa obriga”.
