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| Jessy Jensen. |
La joven no es la primera experta en el cine para adultos que se incorpora al reparto de la serie basada en los libros de George R.R. Martin. La actriz que encarna a la prostituta favorita de Tyrion Lannister participó hace años en varias cintas pornográficas.
Más picante para Poniente. La HBO ha fichado a la actrizJessica Jensen, una estrella del cine para adultos conocida como Jessy Jensen, para incorporarse en el reparto de la cuarta temporada de Juego de Tronos. El nuevo rostro de la serie basada en los libros de George R.R. Martin dará mucho que hablar. La joven actriz, de 22 años, encarnará a un nuevo personaje que está, sin embargo, todavía por determinar.
De momento, Jessy Jensen ya se ha trasladado a Belfast para arrancar el rodaje de la serie, como confirmó ella misma en su cuenta de Twitter. A ella se le suman otras incorporaciones como Roger Ashton-Griffiths (que dará vida a Marce Tyrell), Pedro Pascal (que encarnará a Oberyn Martell), Indira Varma (que interpretará a Ellaria Arena), Joseph Gatt (que podría ser el Magnar de Thenn), Daniel Rabin (en la piel de Lord Blackmont) y Hafthor Julius Bjornsson (el tercer actor que de vida al sanguinario y gigantesco caballero Gregor Clegane, conocido como La Montaña).
¿Demasiado sexo en «Juego de Tronos»?
No es la primera vez que Juego de Tronos recluta a actrices con experiencia en el cine para adultos. La alemana Sibel Kekilli, que interpreta a la prostituta Shae, la favorita del sagaz enano Tyrion Lannister al que da vida el ganador de un Globo de Oro Peter Dinklage, también participó en varias producciones de cine porno antes de saltar a la fama en la ficción de la HBO.
La polémica sobre la cantidad de sexo que incluye Juego de Tronos ha sido una constante a lo largo de las tres temporadas que lleva emitidas la serie. La multitud de desnudos y escenas sexuales que exige la trama de la historia de George R.R. Martin ha supuesto que incluso alguna de las estrellas femeninas de la serie anunciase que no volvería a mostrarse sin ropa para la ficción. Los productores, guionistas y otros actores, sin embargo, defienden este marcado caracter sexual de Juego de Tronos, indispensable para que la serie respete el espíritu de los libros, sustentado por la violencia desmedida y el sexo.
